Exmilitares y paramilitares colombianos han sido reclutados por el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL) y el Cártel de Sinaloa (CDS) para operar en el estado de Guanajuato, esto como parte de la violenta guerra que sostienen contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Así lo revela Héctor de Mauleón en su columna publicada en EL UNIVERSAL.
El periodista y escritor refiere un hecho violento que ocurrió el pasado 20 de noviembre de 2022, cuando una base de la policía municipal en San Juan de la Vega, Celaya, fue atacada por un comando armado que portaba equipo táctico y chalecos con la leyenda del Ejército Mexicano.
Tras lo ocurrido los agresores huyeron pero fueron alcanzados por unidad de la Secretaría de Seguridad; se registró un enfrentamiento que dejó como saldo dos civiles armados muertos. Algunos de los atacantes huyeron y se atrincheraron en una casa, donde sometieron a los habitantes. El saldo final de estos hechos fue de seis muertos y una mujer herida.
Los agentes fueron acusados de uso desmedido de la fuerza. Pero la gran sorpresa vino cuando algunos de los cuerpos abatidos fueron identificados. Entre los muertos había dos exmilitares colombianos que habían recibido entrenamiento en el Medio Oriente.
Uno de ellos era campeón mundial de jiu-jitsu. Sus nombres, según la investigación que se desprendió de los hechos, Jarinton Jesús López Sarmiento y Geovanny Ferer Estrada.
Ambos solían exhibir sus músculos, sus armas y sus equipos en las redes sociales, narra Héctor de Mauleón.
De acuerdo con De Mauléon, “El día del tiroteo, los colombianos llevaban operando cosa de medio año en el estado. Su misión consistía, además de fungir como brazo armado, en brindar entrenamiento militar en campos de adiestramiento a los sicarios del cártel”.
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Mujeres desaparecidas en Celaya
En su texto, Héctor de Mauleón revela también que esta célula de colombianos, liderada por Jorvey David Pacheco, estaría vinculada también con la desaparición y muerte de seis mujeres, ocurrida en Celaya, y cuyos restos fueron hallados en el municipio de Juventino Rosas.
“La hipótesis que arrojan las investigaciones es que una de ellas fue sorprendida enviando un mensaje de texto. Esto fue lo que desencadenó el fin.”, refiere el texto.
El último contacto con las seis mujeres ocurrió en el camino a San José de Guanajuato y el fraccionamiento Álamo Country Club, en Celaya. Una zona que colinda con Santa Rosa de Lima, una población localizada en el municipio de Villagrán.
Se sabe que en la región hay presencia del Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), organización criminal fundada por David Rogel Figueroa alias “El Güero” y José Antonio Yépez Ortiz alias “El Marro”.
El CSRL se dedica principalmente al robo de combustible (conocido como huachicoleo) y al narcotráfico. La organización es considerada como una de las más violentas de México, y ha llevado a cabo numerosos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y otros grupos delictivos en la región.
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