Los habitantes de la ciudad se encargan de alimentar la leyenda de los túneles de Irapuato; por lo que cada vez que se inicia una obra surge la pregunta entre la población si saldrá a la luz nuevos pasillos subterráneos.
Pocos irapuatenses han recorrido los supuesto túneles, pero todos saben de esta historia y su curiosidad se alimenta cuando al entrar a predios antiguos ven algunos pasadizos estrechos.
Las personas consultan mapas viejos de Irapuato, preguntan por la edificación de las iglesias, plazas simbólicas y de edificios como la Casa de la Inquisición, hoy Museo de la Ciudad, o de la Presidencia Municipal, el antiguo Colegio de la Enseñanza.
Esa supuesta red de túneles es la más famosa, se menciona que el Palacio de Gobierno de Irapuato salen varias ramificaciones de pasillos subterráneos con salidas al templo de La Soledad, al templo del Hospitalito y varias cuadras más hasta el Museo de Irapuato.
Obras dejan al descubierto túneles
Al demoler la Escuela Primaria ‘Josefa Ortiz de Domínguez’, se sepultaron también varias historias de otra ramificación de túneles; el predio sirvió como convento, cárcel y después fue centro de educación.
Debemos centrarnos cuando religiosos vivieron ahí; se menciona que ellos conectaron túneles desde ese edificio para salir cientos a la Plaza de los Fundadores o el Mercado Hidalgo.
El mito creció en la administración de Sebastián Martínez Castro, cuando en 1985 se encontró en la Plaza de los Fundadores una gran bóveda.
Los túneles de Irapuato, ¿a qué época se remontan?
Para muchos estos túneles debieron ser construidos por los pobladores irapuatenses de inicio del siglo XX, cuando se concentraron fuerzas federales para detener el avance de revolucionarios y después durante ‘La Guerra de los Cristeros’.
Se cree que la población usó la red para esconder sus pertenencias y así evitar ser saqueados por las fuerzas militares o incluso se usaron de refugio para personas perseguidas por el Gobierno de México u otros bandos rivales.
La versión de que su construcción fue entre los años 1920 a 1930 crece al estar localizados en edificios que le pertenecieron a la Iglesia Católica.
Los cristeros usaron los túneles para defensa.
La leyenda de los túneles de Irapuato sigue vigente por el interés para saber su origen.